POR SUS HECHOS LOS CONOCEREÍS

               POR  SUS  HECHOS  LOS  CONOCEREÍS.

Recurro a dar este nombre a este artículo de opinión, consciente de que no puede ser comprensible por ahora, algunos comportamientos de Pablo Iglesias, como los realizados en la primera sesión de investidura de Pedro Sánchez.

Después de “tanto rollo verbal” y poses teatreras con un telón de fondo, en el que la ambición personal y la falta de un mínimo de educación y respeto, para todos los demás sobresalta en Pablo Iglesias.

Después de toda la demagogia empleada “Queriendo barrer a todo y a todos”, “asaltar el cielo” y pretender ser el nuevo inquilino de la Moncloa….después de todo, a la hora de la verdad, donde se miden los hombres y las mujeres, su honestidad e inteligencia política….Pablo Iglesias en la primera oportunidad que ha tenido, ha votado con Mariano Rajoy.

Y es precisamente en esas ocasiones – ahora en las sesiones para la investidura de Pedro Sánchez – donde están pasando por el peso y el metro de la báscula, los políticos que tenemos sentados en los escaños del Congreso de los Diputados.

Es ahí y ayer, cuando se ha podido comprobar una vez más, “una gran pérdida del peso político” de Pablo Iglesias y además de una “talla que se está encogiendo como una tela de mala calidad cuando se moja”. Precisamente como consecuencia de “sus buenos modales” que ayer derrocho a lo largo de sus desafortunadas intervenciones.

En definitiva, cada día está más lejos de convencer a quien esté prestando atención a las actuaciones de este “líder”. Tantas veces y tanto como ha reprochado a Pedro Sánchez por su acuerdo con Ciudadanos, defendiendo “su cambio”, y en la primera ocasión ha votado contra el cambio, votando para apuntalar la vieja política que representa Mariano Rajoy y el PP.

No son imaginaciones mías, pero creo que Pablo Iglesias lo va a tener difícil para explicar a sus votantes, lo que ha hecho con su voto en contra de las 200 propuestas para el CAMBIO que aportaban el PSOE y Ciudadanos en su acuerdo.

Sí, lo va a tener difícil para explicarlo. Y va a ser imposible que lo entiendan sus votantes.

En primer lugar, ¿cómo va a explicar su posicionamiento independista al imponer la primera “línea roja” la exigencia de un referéndum en Cataluña para satisfacer la vieja aspiración de la peor burguesía catalana?.

Y a ver que dice del reproche “intolerable” al PSOE, con la intención de contar con cuatro grupos parlamentarios, cuando solo tenía derecho a uno. Y como explicará a sus socios que los engañó sencillamente para contar con el apoyo de estos socios en Valencia, Cataluña y Galicia.

Y que dirá,  de la pataleta para ocupar un lugar en el hemiciclo, para poderse sentar ante los medios para que lo vean.

Y como va a explicar que la condición “inexorable” para dialogar con el PSOE, era que este partido de entrada tenía que aceptar que Pablo Iglesias fuese el vicepresidente del Gobierno y además con mando sobre jueces, fiscales, policías y agentes del CNI y la aceptación de Medios Consejo de Ministros decididos por él.

Y además la negativa a que el PSOE negociara con Ciudadanos, y que solo se negociara con Podemos como si no hubiera en el mundo mundial nada más que Podemos.

¡Ay! Que difícil lo tiene, y lo va a tener más en la medida que lo que ha   propuesto y lo que ha votado, es la consecuencia de un comportamiento en política moralmente inaceptable, es solo un simple cálculo personalista, partidista y electoralista de este emergente Pablo Iglesias.

Los españoles, vamos tomando nota de esas actuaciones,  los trabajadores, los parados sin prestación, los jóvenes sin becas, los  desahucios sin alternativa, los pensionistas con copago, los dependientes sin ayuda.

¿Es  que van a merecer, que las 200 medidas que recoge el acuerdo del PSOE y Ciudadanos no se vaya a aplicar por el vergonzoso  cálculo de Podemos?

¿Y todos los españoles, nos merecemos que siga Mariano Rajoy algún tiempo más en el Gobierno?

Pablo Iglesias aún no se ha enterado que los nuevos tiempos exigen gobernar pactando, acordando con otras fuerzas políticas que no son de tu agrado, desdiciéndose muchas veces de lo dicho, tragándose adjetivos como sapos, lugares comunes y mentiras electorales. Se han acabado las dictaduras de las mayorías absolutas incluso las relativas cuasi-absolutas, pero también caudillitos ultraizquierdista como lo es él.

Por eso creo, que según reza en el título de este artículo, conociendo cada día más a Pablo Iglesias, los que fueron sus seguidores van a desconfiar de Podemos en las próximas elecciones porque por sus hechos se le está conociendo. Ya lo verá.

                              3 marzo 2016.