miércoles, 27 de enero de 2016

NI CON UNO, NI CON OTRO, TIENEN LOS MALES REMEDIO.


NI CON UNO, NI CON OTRO, TIENEN LOS MALES REMEDIO.

 
El 28 de febrero, el Gobierno oficialmente debe enviar a Bruselas el déficit de 2015, y se aplicará el protocolo de déficit excesivo por incumplimiento por cuarto año consecutivo durante la legislatura.
Esto condicionará enormemente la formación de un Gobierno en España. El debate está ahora en la sesión de investidura, pero un Gobierno estable exige un acuerdo de legislatura.
La corrupción no cesa, este fin de semana Bárcenas ha filtrado que tiene una grabación de Mariano Rajoy, recogiendo uno de sus sobres procedentes de una supuesta financiación irregular.
Por otro lado, el mismo día en que Mariano Rajoy comunicó que rechazaba la propuesta del Rey para su investidura por “contar con la mayoría absoluta en su contra”, el PP y su tesorera eran imputados por la destrucción de los discos duros de los ordenadores de Luis Bárcenas.
Y el martes 26 de los corrientes, otra vez la corrupción le vuelve a estallar al PP en plena negociación de los pactos. Una nueva trama en Valencia, con la detención de 24 personas a las que se les acusa de formar parte de una trama de corrupción municipal del PP en la Comunidad Valenciana y que según fuentes de la investigación apuntan a la implicación a la ex-alcaldesa de Valencia Rita Barberá, aforada actualmente por ser senadora.
Y además, la citación de Rodrigo Rato a declarar por una nueva causa secreta, hace que los titulares de prensa sobre corrupción se suceden en el PP y minan su agenda negociadora.
En este contexto, y ante tales circunstancias Mariano Rajoy en mi opinión debería dimitir y dedicarse a la pesca del percebe en su tierra, y no dilatar que se pueda presentar el próximo aspirante a ser investido que designe el Rey.
Y lo que me ha aparecido un auténtico “esperpento” a lo Valle Inclán, ha sido la opinión de Felipe González para que Pedro Sánchez permita mediante la abstención, la creación de un Gobierno PP – Ciudadanos.
Con el máximo respeto, pero con mi más absoluta oposición a esa “espeluznante idea” quisiera desde aquí aconsejarle al Sr. Felipe González, que callado está más guapo. Y preguntarle ¿Qué a cuantos casos de corrupción de dirigentes y cargos públicos tendría  que alcanzar en el PP, para que usted, ex - dirigente del PSOE entendiera QUE YA NO SE PODIA FAVORECER LA CREACIÓN DEL GOBIERNO DEL PP? Vamos cállese y cuide su estado de salud.
Porque presiones no están faltando sobre Pedro Sánchez para que se haga una Gran Coalición a la alemana. Los que tanto presionan o no piensan o se olvidan de algo tan fundamental. Y es que en Alemania, no sería posible que con la corrupción que ha estado acumulando el PP, a estas alturas no sería ni pensable, que Rajoy siguiese siendo Presidente.
A Mariano Rajoy, no lo va a votar NADIE EN SU INVESTIDURA, si es que aún Felipe VI se lo propone. No lo creo.
Pero lo importante, entre lo importante no es, quien puede apoyar a Rajoy en su investidura. El problema es quien apoyará el reajuste adicional en el Parlamente para cumplir con el compromiso de Bruselas.
Y sin ningún derrotismo por mi parte, pero no conseguirlo nos situaría con Gobierno sí, pero con una fuerte inestabilidad como le sucedió a Syriza en Grecia.
La alternativa a una Gran Coalición, es un mal que se ha hecho aún menos probable, tras el acuerdo independentista en Cataluña.
Podemos pacto (engañando) listas con Colau y En Comú Podem que exige un referéndum en Cataluña y grupo propio en el Congreso, ya que afirman “su obediencia catalana”
Las Mareas en Galicia también empiezan a reivindicar otro referéndum de independencia gallego.
Tras el mal resultado en las elecciones catalanas, Podemos optó por acuerdos con fuerzas nacionalistas diversas, y todo parece que ha sido un error más grave aún que apoyar a Syriza y “su corralito” en Grecia
La sensación que me da Pablo Iglesias es que ha perdido el control de todas sus alianzas, quizá por eso tiene tanta prisa para ser “vicepresidente” del Gobierno que presida Pedro Sánchez y poderlo dinamitar en su funcionamiento con sus propuestas demagógicas y hacerlo inviable.
Por ambas razones, ni con Mariano Rajoy y el PP, pese a los consejos del “jarrón chino”, ni con Pablo Iglesias ni Podemos, el PSOE debe formar Gobierno.
Ni con uno, ni con otro, tienen los males remedio.
Y si al final, hay que ir a unas nuevas elecciones, ese no va a ser el gran drama de nuestro país. Y los resultados no están escritos.
 El drama son los otros: Los consejos de algunos y las presiones, y los populismos emergentes.

                                   27 enero 2016.

 

martes, 26 de enero de 2016

REFLEXIONES - OPINIONES Y DATOS OPORTUNOS.


    

Estamos viviendo en España, unos momentos donde el desconcierto y la entropía van en aumento, hacia un escenario quizá el más probable, como serán unas elecciones allá para el mes de junio.
Inicio pues, este conjunto de datos reales y de opiniones convencido de que pueden ser de utilidad darlos a conocer en estos momentos tan cruciales para nuestro país.
Tengo que empezar reconociendo mi extrañeza al comprobar una campaña electoral como la que hemos constatado, donde al electorado se nos ha vetado del conocimiento de datos y propuestas concretas de los partidos que han competido a las elecciones del 20 D. En general los sondeos han estado dando datos, que a la fin y a la postre en ninguno de ellos acertaron pero ni de lejos.
A mí me parece, que si se hubiesen conocido determinados datos de la realidad económica, pues quizá el PP no habría sido el partido más votado, ni tampoco se hubiera dado esta fragmentación parlamentaria en los resultados del 20 D, que hacen muy complicada la investidura del Presidente del Gobierno.
Yo me atrevo ahora ha indicar determinados datos económicos, de mucho interés conocerlos, Eso al menos me parece a mí.
Veamos, hasta la fecha de hoy, aún no habiendo datos de confianza del consumo de enero, para saber cómo les ha afectado la incertidumbre política. Si se sabe que la tasa de ahorro española está en mininos y que parte del consumo de Navidades se hizo a crédito. Por lo tanto es previsible que la  llamada “cuesta de enero” va a ser más dura que la anterior, y que “hasta Bahamontes en sus buenos tiempos no sería capaz de subirla”, y que el consumo siga desacelerándose.

Además de esa situación, la semana pasada el Presidente el Eurogrupo, y esta semana el Comisario de Economía de la Comisión han vuelto a recordar al Gobierno español, que no cumplirá el objetivo de déficit de 2015.
Y con los presupuestos presentados, tampoco los de 2016, por lo que serán necesarios ajustes adicionales. O sea más impuestos y más recortes del gasto social.
Mientras toda España, seguimos con asombro y desconcierto el insólito espectáculo de pactos, inclusive de aparición espontanea de casi un Gobierno sin saberlo nadie, y sin negociaciones.
Pero ¿porque no vamos a cumplir con el déficit?
Pues porque durante cuatro años el Gobierno de Mariano Rajoy ha culpado a Zapatero y después a las Comunidades Autónomas de sus incumplimientos sistemáticos del déficit. Y ni siquiera tras el batacazo electoral de estas elecciones hemos escuchado – porque no se ha hecho – ni la más mínima autocrítica en el PP, ni por supuesto de su líder.
La realidad es que el culpable del incumplimiento, tiene un nombre: Mariano Rajoy Brei.
El déficit de la Administración Central y la Seguridad Social, gestionada por Rajoy en el 2011 son datos oficiales y en 2015 por Zapatero, aunque a falta de un mes, el dato tiene un mínimo error, es que en el 2011 el déficit fue de 32,000 millones y en 2015, de 42,000 millones aproximadamente en ambos años.
Eliminando las ayudas públicas a la banca que el Señor Rajoy decidió contabilizar en 5000 millones de recorte de Bankia en 2011, a pesar de que todos los españoles sabemos, ó casi todos que el rescate fue en 2012.
Rajoy ha incrementado el déficit en 11,000 millones de euros, el 1% del PIB.
Y el aumento del déficit se ha producido a pesar de que Rajoy nos ha aplicado  a los españoles la mayor subida de impuestos de la Historia de España. Si se me permite la broma diré que desde los Iberos y los Celtas.
El estado ha recaudado de las familias y las empresas 20,000 millones más con Rajoy que con Zapatero. Sin embargo, la Seguridad Social recauda 5,000 millones menos a pesar de haber subido las cotizaciones al eliminar la exención de cheques de comida y complementos. La causa también tiene nombre y apellidos: la reforma laboral de Mariano Rajoy Brei que en 2012 con una tasa de paro del 25% y una destrucción de empleo brutal provocada por una mezcla explosiva de restricción de crédito producto del rescate y recortes brutales, tuvo la feliz idea de eliminar la negociación colectiva y permitir la mayor bajada de salarios de la Historia de España.
Las familias españolas cobraron en salarios en 2014, 40,000 millones menos que en 2011. Como consecuencia de la precariedad, especialmente por la creación de empleo a tiempo parcial con salarios la mitad de los que había, aunque muchos trabajan hasta 35 horas.
En 2011 la herencia recibida por Rajoy fue la Seguridad Social en equilibrio de ingresos y gastos y 70,000 millones en la hucha de las pensiones.
Pero en 2015, Rajoy ha dejado de herencia un déficit de 11,000 millones, por eso se ha comido la mitad de la hucha y el sistema de pensiones público que nos ha costado décadas de construir, amenazado.
Durante los cuatro años de la legislatura del Gobierno de Rajoy, hemos escuchado tropecientas mil veces de la vicepresidenta del Gobierno, decir que su plan para reducir la burocracia nos había ahorrado a los españoles 10,000 millones. Sin embargo la realidad nos ha mostrado que el gasto en salarios de los funcionarios ha sido similar al de 2011, y también que los costes generales han sido similares.
Por lo tanto, la vicepresidenta lo que ha aprendido, es lo peor de Rajoy, que es mentir a los españoles.
En el PP, ni los mayores ni los jóvenes todavía han asumido que en la época de internet, es muy sencillo que alguien publique un post y decenas de miles de españoles lo lean y se den cuenta de que mienten.
Rajoy nos decía en la campaña de 2011, que no había que gastar lo que no se tenía. Pero ha hecho todo lo contrario.
Pero la deuda pública ha aumentado más de 300,000 millones en cuatro años y a pesar de la intervención de Draghi, que ha bajado los tipos del BCE al 0 % y compra nuestra deuda pública. Todo ello ha reducido nuestra prima de riesgo, mientras Rajoy se gastó en 2015, 11,000 millones más que Zapatero en 2011.
Esos 11,000 millones son la misma cantidad que ha recortado Rajoy en pago por prestación por desempleo y deja 600,000 parados sin prestación y con pobreza severa
Esta es la peor herencia que nos ha dejado Rajoy, especialmente las mujeres solteras ó divorciadas con hijos a cargo, donde se concentra la pobreza infantil, niños que no cubren loas mínimos nutricionales que recomienda la Organización Mundial de la Salud y que no pueden poner la calefacción en invierno.
El debate en España, debería ser como piensan los partidos en sus pactos resolver la herencia recibida de Rajoy, en vez de hacerlo en torno a la formación de los grupos en el Parlamento, a los referéndums ó a los improvisados Gobiernos del Sr. Iglesias.
Ahora, en estos días lo más increíble es que tras los numeritos de Pablo Iglesias queriendo ser vicepresidente del Gobierno con sus “ministrables” consciente de la débil situación surgida de estas elecciones sigue exigiendo un referéndum de independencia vinculante para Cataluña y estar en el Gobierno con el PSOE. Y para eso hay que reformar la Constitución cosa que hasta una niña de ocho años sabe que sería necesaria la participación del PP.
Pero ni por las formas insultantes, ni por los contenidos, Pablo Iglesias no puede aspirara a gobernar con el PSOE. Si ya ha dejado claro con su comportamiento, que no quiere el pacto de Gobierno ni quiere gobernar.
Y además para pactar o formar parte de un Gobierno con el PSOE, en mi opinión, es que no basta tener 300,000 votos menos que este partido. Hay que tener un programa serio y ser un partido con el que se compartan principios y valores que le faltan a Podemos. Es decir que el PSOE y Podemos son dos partidos antagónicos, y un Gobierno así saltaría por los aires como ha sucedido con Syriza en Grecia, en cuanto han tenido que tomar decisiones.
 Estoy convencido que será por ellos, por Podemos que serán los únicos culpables  quizá de que no apoyen para tener un Gobierno socialista con Pedro Sánchez como Presidente del Gobierno.
Y a partir de esa situación, habrá que convocar nuevas elecciones, y reposadamente se tendrá que empezar por hacer un diagnóstico correcto de la crisis.
Porque se han cometido muchos errores en este país, que han conducido a la ingobernabilidad, y al caos que en mi opinión comenzó, cuando se condenó a Zapatero como único responsable de la crisis.
Zapatero, cometió errores, como todos los gobernantes, pero no fue el culpable de la crisis. En España acusamos a Zapatero como si fuera el demonio y lo quemamos en la hoguera. Pero después llegó el rescate, seguimos destruyendo empleo y encima llegó la deflación salarial y la institucionalización de la pobreza
Buscar un enemigo externo desahoga el cabreo, pero te mete en una realidad paralela que te aleja de la solución de la crisis.
En esa dinámica, por la fuerza de actuar han estado muchas fuerzas en nuestro país: Desde el PP, IU, Podemos y todo el poder mediático con el único objetivo de acabar con el PSOE, que a pesar de sus aciertos y errores a lo largo de su larga historia, es hoy el único partido político serio, con un programa de Gobierno serio y posible, y que tiene como líder a quien puede ser el Presidente del Gobierno que hoy necesitamos en este país.
Rajoy, tampoco ha sido el culpable de la crisis, pero ha sido el inquisidor que nos dijo que quemando a Zapatero se acabaría la crisis. Y lo quemó con la ayuda de otros partidos y fuerzas antisocialistas y populistas, que hoy aún siguen combatiendo al PSOE más que al PP
Pero la deuda externa siguió aumentando desde el 2011 (como bien he indicado al principio), y la crisis continua
Rajoy ha demostrado, que no tenía ni diagnóstico, ni sabia como salir de la crisis. Y además con la podredumbre de la corrupción en su partido ha perdido la mayoría absoluta de su partido y ha acabado su carrera política.
Por eso, los numeritos de la gente del PP que a pesar de la renuncia/aplazamiento del candidato a Presidente de presentarse a la investidura, siguen proclamando como han sido el partido más votado, que tienen que ser ellos quienes formen el Gobierno. “O ellos ó el caos”, proclaman y se quedan tan panchos. Están haciendo el ridículo más espantoso.
Porque, aquí en España el único caos son, el PP y Mariano Rajoy. ¿Pero es que hay que decírselo cantando?.
España está hoy, así la veo yo, más cerca del precipicio y hay muchos aprendices de brujos como Iglesias, Errejón, Bescansa, etc., que lo que están proponiendo es que demos un paso al frente.
En estas circunstancias, lo más razonable para España va a ser la convocatoria de unas nuevas elecciones generales, para poder resolver el caos que han generado estos ”aprendices de brujo”, y maquiavélicos en potencia.
Pero antes quizá, nos podemos encontrar que, Felipe VI emplaza a Pedro Sánchez a presentarse a la investidura como Presidente de Gobierno para gobernar España.
Desde esas perspectivas, creo que en la reunión del Comité Federal del PSOE del próximo 30 de los corrientes deberían apoyar por unanimidad – unánime- y espero hacerme entender.
Que Pedro Sánchez desde la tribuna del Congreso de los Diputados exponga la propuesta de programa de cambio, progresista, reformista y de izquierda  que llevaría a cabo si es el próximo Presidente del Gobierno. De un gobierno monocolor.
Y lo votaran, en aquellos momentos, los que de verdad están por los cambios, los que acabaran con los gobiernos del PP, y los que harán posible la recuperación de los derechos perdidos y deseen un futuro que solo con el PSOE y el apoyo de otras sensibilidades se pueda abordar la reforma Constitucional que haga posible la unidad y la convivencia en esta piel de toro que llamamos España de todos los pueblos que la formamos.

                                   26 enero 2016.

 

 

sábado, 23 de enero de 2016

LOS ACUERDOS DEBEN DE SER PARA GOBERNAR.


    LOS  ACUERDOS DEBEN DE  SER  PARA  GOBERNAR.


En dos de mis últimos artículos publicados en mi blog “Las investiduras no garantizaran la Gobernabilidad” y el titulado “Un mal escenario,” analizaba las dificultades que suponían la fragmentación parlamentaria surgida de las urnas el pasado 20 D, ya que constituían  un enorme muro de dificultades para la formación de mayorías, tanto para alcanzar la investidura del Presidente del Gobierno, sea del signo que fuese, como para hacer posible la gobernabilidad estable del futuro Gobierno del país.
Yo terminaba ambos artículos expresando mi convicción de que al final del proceso de investidura, por su imposibilidad iríamos a unas nuevas elecciones. Recomiendo su lectura a la que hoy, vengo a añadir esta reflexión que me siento en la necesidad de realizar, en el aún mayor y más complicado momento actual.
Por un lado, con la retirada por el momento de Rajoy hasta lograr los apoyos suficientes para ser investido, y por el otro por la estrafalaria propuesta al jefe del Estado Felipe VI, por Pablo Iglesias de formar un Gobierno con el PSOE e IU con él como vice-Presidente  y con ocho ministerios con representantes de Podemos, entre ellos los de Economía, Defensa, Interior, Justicia, Exteriores y un nuevo Ministerio de la Plurinacionalidad. Que así manifestó en la rueda de prensa tras la visita al Rey.
Veamos la evolución de este aspirante a Vicepresidente del Gobierno.
El pasado mes de julio Pablo Iglesias garantizó que su formación no entraría a formar parte de un Gobierno presidido por otro partido político, y que él no aceptaría ser vice-presidente del líder socialista Pedro Sánchez ó de cualquier otro candidato a las próximas elecciones generales.
Iglesias ya dijo entonces que su aspiración era ganar las elecciones generales - cosa que no ha logrado – y que en caso de no hacerlo dentro de las conversaciones con otros partidos no entraría la posibilidad de un Gobierno de coalición, en línea con la norma que ya rigió en las negociaciones de Podemos tras las elecciones autonómicas de mayo.
Sin embargo este viernes “casi con nocturnidad y clara alevosía” Pablo Iglesias ha asegurado al Rey su disposición a ser vice-presidente de un Gobierno de coalición presidido por Pedro Sánchez. Justificando ese giro porque en las elecciones generales se quedo a unos 300,000 votos por detrás del PSOE, y “porque su partido no se fía de lo que pueda hacer un Gobierno socialista en solitario”.
“Nosotros no nos vamos a fiar de las buenas palabras. Las garantías para que en este país haya Gobierno de cambio es que entremos en este Gobierno, que estemos en el Consejo de Ministros” ha remachado.
Pero además ha defendido que para que haya “un Gobierno de cambio tienen que haber personas que ejerzan el cambio” y ha avisado “de que Podemos no se fía de las buenas palabras del PSOE”.
Lo curioso, pero eso ya es una norma de conducta de este personaje, que propone a Pedro Sánchez como Presidente delo Gobierno, pero al mismo tiempo con un claro gesto de desprecio y desdén, propio de una chulería política inaceptable Pablo Iglesias ha afirmado que “Pedro Sánchez no está en condiciones de proponer Gobierno”. La posibilidad histórica de que Pedro Sánchez pueda ser Presidente “es una sonrisa del destino que siempre me tendrá que agradecer”.
Desde luego palabras que no tienen desperdicio, porque en nada tienen de  declaración amistosa y de buenas intenciones de un vice-presidente a su Presidente del futuro Gobierno. Vaya talante del Sr. Iglesias.
Esta propuesta de su mini-Gobierno que ha realizado Pablo Iglesias sin contar con nadie ni con el PSOE ni con IU, a mi no me ha extrañado porque no es una propuesta ni por los métodos ni tampoco por los contenidos para alcanzar el acuerdo de un Gobierno tripartito.
¿Pues a que está jugando Pablo Iglesias? Pues sencillamente a desplazar al PSOE desde el mismo Gobierno, si este se realizase,  haciéndolo ingobernable con sus propuestas lo que nos conduciría a una crisis del Gobierno y su duración sería muy corta.
La propuesta de Pablo Iglesias ha sido de una falta de respeto a Pedro Sánchez, al PSOE, a sus militantes y a quienes hemos votado a este partido. Yo me identifico con quienes lo han calificado un insulto y una humillación. Jamás se había escuchado propuestas para hacer un Gobierno, insultando al principal partido con el que se dice que quiere Gobernar.
Además, las declaraciones de Pablo Iglesias ¿En qué Círculo de su organización se ha discutido y acordado?. Sencillamente en NINGUNO, porque está claro que lo que buscaba era sacudirse de que no se alcance un Gobierno de izquierdas, y de que se tengan que convocar nuevas elecciones. Aunque lo que iba a utilizar era la crítica al PSOE de no haber querido formar un Gobierno de izquierdas.
Porque el proyecto de reforma de la Constitución que Pablo Iglesias ha iniciado a esbozar durante la campaña electoral como condición para negociar con las demás fuerzas en el Congreso de los Diputados, está “la asunción de la plurinacionalidad y nuevos encajes constitucionales para construir un  futuro de convivencia”, lo que supone permitir referendos de independencia en las Comunidades autónomas. Y eso no es ya el referéndum de Cataluña, es que según Podemos hay que reconocer el derecho de cada Autonomía para decidir si quieren ser independientes.  
Bueno el colmo de lo imposible se mire por donde se mire.
Pablo Iglesias con su actuación, ha iniciado la pre-crisis en ese futuro Gobierno con el PSOE  en el  que  se ofrece como vice-presidente, y además ha empezado el primer acto de su campaña electoral ante las próximas elecciones generales
Por todo ello, a la hora de que Pedro Sánchez trata de obtener los apoyos necesarios para su investidura, debería en mi opinión, sospesar que pactos como el que propone el populismo y ultra izquierdismo del equipo dirigente de Podemos, no debería ser tenido en cuenta como el socio ideal para formar gobierno, ni para pactar las políticas económicas y sociales, ni las reformas de la Constitución que proponen.
Desde mi absoluto convencimiento creo que en primer lugar tanto Pedro Sánchez, y el Comité Federal  del PSOE en su reunión del 30 de este mes, deberían adoptar una posición clara e inequívoca sin ninguna fisura basada en el rechazo a las propuestas de Pablo Iglesias y a formar Gobierno con esa fuerza. Porque entre otras cosas el PSOE y Podemos son dos partidos radicalmente antagónicos.
Y que el candidato socialista desde la tribuna del Congreso,  cuando le llegue el momento de solicitar la investidura exponga todo el conjunto de propuestas que se realizarían desde el Gobierno si es investido Presidente. Y si ni en la primera  ni en la segunda intención no obtiene la aprobación del Congreso de los Diputados. La soberanía del pueblo tendrá que volver a expresarse en las urnas. Y no pasará nada, no hay que temer que el pueblo opine otra vez. A veces el pueblo incluso una inmensa mayoría en determinados momentos históricos se ha equivocado.
Y no está escrito que los resultados de esas inevitables elecciones vayan a beneficiar a tal o cual partido. Lo que se requiere a mi modo de ver es que hay que desarrollar una labor pedagógica desde el PSOE para que los españoles conozcan con detalle los problemas reales y las alternativas que ha venido defendiendo y defiende este partido
En mi opinión, y no creo equivocarme, el gran problema que tenemos es que la soberanía del pueblo, mientras no analice a donde nos llevarían las políticas de Podemos con sus propuestas y rectifiquen aquellos que esperanzados les votaron. El problema en España seguirá siendo el “populismo ultraizquierdista” trasnochado que inspiran a la troika Podemista desde su emergencia política como partido “salvador de todos los males”.
Y cuando dicen que quieren hacer una nueva transición, a mi me viene al recuerdo la talla de hombres políticos como Adolfo Suarez, Felipe González, Santiago Carrillo, Manuel Fraga y otros. Y me siento orgulloso de recordarlos como grandes políticos que hicieron posible la Primera Transición. Pero estos de Podemos son una ruina para nuestro país.    
Y el verdadero problema, no es que sean de izquierdas. El problema es que no saben lo que son. Y eso es peligrosísimo.

                                  22 enero 2016.

 

domingo, 17 de enero de 2016

UN MAL ESCENARIO.


         UN   MAL   ESCENARIO.

 

La hiperfragmentación de los escaños surgida de las elecciones generales del 20 D, han hecho del acto de la investidura, sea quien sea el candidato, un acto tan movedizo por lo pantanoso del escenario, donde la fijación de acuerdos es algo imposible de alcanzar.
Esas dificultades, para desgracia de este país, van a afectar al líder socialista Pedro Sánchez, porque solo podría  ser Presidente del Gobierno, si lograra alcanzar un pacto a varias bandas, con Podemos y con los independentistas catalanes.
Un acuerdo de esas características, tanto teóricamente como en la práctica, a mí sinceramente me parece imposible, aunque comprendo y comparto los intentos del líder socialista por lograrlo
Ese acuerdo solo sería posible, si a tenor de las declaraciones de Pablo Iglesias, Pedro Sánchez se viera obligado a asumir la agenda radical de Pablo Iglesias con consecuencias devastadoras para la marcha de la economía, y a impulsar una reforma de la Constitución que permita la independencia de Cataluña mediante el derecho de autodeterminación.
Y eso no va a darse por decisión firme de Pedro Sánchez y del Comité Federal del PSOE.
A mí me parece que además, caso que se diera eso, tendría un coste político muy elevado para el PSOE, que ya han manifestado sus miembros dirigentes.
Entiendo pues, que aún ni por milagro se va a realizar un pacto PSOE – Podemos. Incluso si el milagro, por milagro se alcanzase, hay que recordar que el PP que ha logrado mantener la mayoría absoluta en el Senado, no iba a permitir una Reforma de la Constitución que vulnerase principios fundamentales como la unidad de España.
A pesar de que el PSOE haya quedado el segundo partido más votado, y reconociendo los esfuerzos de Pedro Sánchez desde que es el dirigente de su partido, por lograr su investidura mediante un pacto que exigiría apoyos de difícil credibilidad, sus posibilidades para ser Presidente del Gobierno, creo que han encallado en un terreno de alianzas irrealizables.
En primer lugar porque Pablo Iglesias quiere ir a otras elecciones, convencido de que en ellas ganaría más presencia institucional. Y en segundo lugar porque su objetivo es ocupar el liderazgo de la izquierda que hoy ocupa el PSOE. En mi opinión, dos razones suficientes para no confiar en Podemos y en los “hipotéticos pactos”. Con esa organización además de su radicalismo populista que no lo hacen un socio, ni para comerse una buena paella.
Veamos las matemáticas electorales. Teniendo en cuenta el escrutinio final del 20 D. el PSOE y Podemos suman 159 escaños. Si se incorporaran a ese pacto los independentistas de ERC y Democracia y Libertad (la marca del partido del ex - presidente de la Generalitat Más) vendrían a sumar 176 escaños, justos los que representan la mayoría absoluta del Congreso de los Diputados.
Pero Pablo Iglesias se comprometió con sus alianzas electorales a reconocer el “derecho a la autodeterminación” de las Comunidades Autónomas y a convocar un referéndum sobre la independencia de Cataluña, que son dos exigencias que allanarían el camino al independentismo catalán. Y que no son posibles, al menos actualmente con la Constitución en vigor.
Y para cumplir ambas concesiones, sería preciso abrir de arriba abajo la Constitución con el fin de replantear el modelo territorial del Estado. Una reforma que difícilmente lograría reunir la mayoría cualificada necesaria de tres quintos de los escaños de la Cámara. Y además cuando el PP tiene los votos suficientes para vetarla en el Senado. 
Y aunque Pedro Sánchez y el PSOE quisieran buscar otras combinaciones de Gobierno, en todas ellas necesitaría a ERC y a Democracia y Libertad ó  a ambos partidos (que fueron de la mano a las elecciones catalanas de coalición Junts pel Sí).
O sea que para reunir la mayoría absoluta, el pacto de Gobierno encabezado por Pedro Sánchez, siempre pasaría por ceder ante las pretensiones de los independentistas catalanes. A no ser que estos pospusieran para más tarde que la reforma constitucional que propone el PSOE recoja las singularidades de Cataluña.
Y si no es así, si el PSOE quisiese prescindir de Democracia y Libertad necesitaría el apoyo de Podemos (69 escaños), ERC (9 diputados), PNV (6 escaños) y los dos de Unidad Popular, la nueva marca de IU que encabezada por Alberto Garzón parece que se quiere incorporar a Compromis. Bueno un coctel de siglas de partidos ingobernables en mi modesta opinión.
Descarto de entrada que Sánchez logre el apoyo para gobernar. La cuestión del derecho de autodeterminación se interpone, y aunque no lo hiciera, la suma aún precisa del concurso improbable de otras fuerzas.
Quedan dos tipos de opciones: Algún tipo de entente con el PP, o disponerse hacia unas nuevas elecciones.
Pero para opinar sobre ambas opciones, quisiera exponer la constatación de algunas realidades
De entrada quiero reconocer que al PSOE le ha faltado claridad y constancia en explicar desde hace tiempo, sus posiciones políticas a los españoles y no me refiero a esta reciente campaña electoral sino a una larga trayectoria que va desde 1982. Porque en esa tarea, entiendo que tiene que estar el conjunto de los militantes del partido, no solamente el Secretario General. Ese alejamiento de los problemas de la calle, y la falta de vinculación con los ciudadanos, es sin lugar a dudas para mí, la causa de las pérdidas de la influencia social que ha venido perdiendo este partido en las sucesivas elecciones desde la consecución de la Democracia.
Esa falta de narrativa del PSOE, a mi modo de ver, ha generado más de un problema. Ahora es que, como ha estado con un ataque al PP durante esta legislatura por su política, presentando a este como el causante de todos los males. Y yo no quiero defender al PP porque estoy convencidísimo que su política ha estado llena de errores y que han sido una desgracia absoluta  y total para todos los españoles., quecv había que criticar
 Pero claro, siguiendo con esa dinámica, me da la impresión de que al PSOE, después de utilizar esas prácticas, no ha visto que a lo mejor en lugar de que Pedro Sánchez anunciara en la primera entrevista con Mariano Rajoy, que ni por activa ni por pasiva lo iba a apoyar en la investidura. Hubiese sido más positivo anunciar todo el conjunto de medidas que el PSOE quiere para hacer posible el Cambio que necesita España. Y que todos los españoles las conociéramos.
Que hubiera pasado con ello, pues seguramente que Rajoy no habría aceptado ninguna medida. Y Pedro Sánchez podría haber demostrado ante todo el mundo, que acordar los cambios que se necesitan no habían sido  aceptados el candidato Mariano Rajoy.
Y a lo mejor se hubiese dado las circunstancias que si se hubiera concitado en torno a tal o cual medida las posibilidades de que se realizaran.  
Bueno eso ya ha pasado, pero creo que le ha venido al PSOE como algo muy difícil el vender a sus votantes algún género de pacto con “el enemigo”.
Por otro lado ahora le sucede algo inverso. Es correcto que el PSOE defienda la unidad territorial de España, pero cuando ha estado pactando tanto tiempo con partidos secesionistas, rayando algunos la xenofobia antiespañola, en autonomías y ciudades. Ahora no sabe explicar porque la unidad territorial es importante y además progresista
Esa es la situación real. Está cerrada la posibilidad de acuerdos con el PP porque sería castigado por los electores y por otro lado por las contradicciones, no sabe explicar la negativa ante las exigencias de Podemos
Asi que tras el fracaso de Mariano Rajoy en su intento de investidura y el probable fracaso de las negociaciones para llegar a un Gobierno de izquierdas por la intransigencia de Iglesias. La conclusión a la que vamos a llegar es que, si una gran coalición seria nefasta, lo mejor y la única opción es acudir a las urnas.
Una interpretación de los resultados del 20 D es que, los españoles han votado Cambio. Claro que si vemos el variado conjunto de impotencias, también se puede interpretar que las fuerzas políticas deberían pactar.
El pacto es el verdadero cambio en España.
Y como no está escrito, ni es necesariamente cierto  que el PSOE fuese a salir destruido de un Gobierno de asociación o de coalición, todo dependería de la obra del Gobierno que se hiciera. Como tampoco es necesariamente cierto que Podemos vaya a ganar la hegemonía de la izquierda. Estas especulaciones son hoy de quienes no tienen otra cosa que hacer que intoxicar informativamente.
Ahora bien si al final vamos a las elecciones, el PSOE tiene que prepararse ya. No con las batallitas personales que nunca resuelven ningún problema ni del PSOE, ni de quienes se creen que vayan a salvar a la patria socialista siendo el nuevo Secretario General.

                                  17 enero 2016.

 

 

sábado, 16 de enero de 2016

EL IBEX TIENE UN PLAN B SI FRACASA RAJOY.


      EL  IBEX  TIENE  UN PLAN  B  SI  FRACASA  RAJOY.

En los ambientes del IBEX, consideran que el principal obstáculo para la formación del nuevo gobierno es el líder del PP. y está planteando esta alternativa
La parálisis en Cataluña, abocada prácticamente a unas nuevas elecciones autonómicas, tiene movilizados a los grandes empresarios del país. Sus miradas están centradas en Albert Rivera, quien consideran que debe explorar un acuerdo con Pedro Sánchez si Rajoy fracasa en su investidura para evitar también una situación de ingobernabilidad a nivel nacional.
Ante este escenario tal y como se contó en ECD, varios presidentes y consejeros delegados de destacadas compañías del IBEX, pero también dirigentes de otras organizaciones como la CEOE y el Círculo de Empresarios, se han puesto en contacto estos días con el equipo de Albert Rivera.
Le han transmitido que debe jugar “un papel de mediador” a pesar de las escasas probabilidades de éxito que pueda tener en su primer momento. Han hecho hincapié en que, por motivos generacionales e intereses políticos, el líder del PSOE “sintoniza mucho más” con el de Ciudadanos.
Rajoy es ahora un obstáculo para el pacto.
Pero no es el único mensaje que le han hecho llegar. Según ha podido saber El Confidencial Digital por fuentes empresariales conocedoras de las conversaciones, los directivos de algunas de las más influyentes compañías del país han llegado al convencimiento de que Rajoy es, en este momento, un “obstáculo para resolver la situación de inestabilidad hacia la que camina España”.
Quieren una persona que les dé garantías de que puede llegar a pactos de Estado que, en definitiva garanticen seguir adelante con las reformas que necesita España y no frenen la incipiente recuperación económica. Y Mariano Rajoy, por sus características y su idiosincrasia no es esa persona.
Lograr una investidura en segunda votación. Según las fuentes consultadas, los grandes empresarios cuentan con que, en el caso de la mayoría absoluta (176 escaños), que es el resultado que se necesita en la primera votación en el Congreso para lograr la investidura, ningún partido lo logrará por sí solo y necesitará grandes coaliciones y en algunos incluso el voto de otras fuerzas como ERC ó PNV para conseguirlo.
La segunda votación y, que se realiza 48 horas después de la primera, exige mayoría simple. Es decir, conseguir más votos a favor que en contra. Una opción que a la vista de los resultados, se considera más probable.
Que Rivera explore un pacto con Pedro Sánchez.
Ante este escenario, han trazado un escenario en caso de que Rajoy fracase en su intento de ser investido presidente. Y en esa alternativa entra en escena Albert Rivera, quien debería explorar un pacto con Pedro Sánchez para lograr un acuerdo de estabilidad, que cuente con la abstención del PP ó de Podemos.
Con la abstención del PP, la suma del PSOE y Ciudadanos lograría más votos a favor que en contra. El voto en contra del resto de fuerzas sumaria 97, con lo que el pacto Sánchez- Rivera si conseguiría mayoría simple.
Si solo vota en contra el PP, lograría 130 votos frente a los 123 del PP, pero el resto de fuerzas deberían abstenerse incluido Podemos. Mientras que si solo rechaza ese pacto el partido de Pablo Iglesias  también conseguirían la mayoría simple: 69 votos en contra frente a los 130.
Conciben que en ese escenario, el PP podría aceptar abstenerse tras haber fracasado en su intento de investir a Rajoy. Por su parte, Podemos se quedaría como “la alternativa del pueblo”, la verdadera izquierda en la oposición que ganaría todo el terreno que hasta ahora no ha conseguido.
El objetivo es evitar unas nuevas elecciones.
Las fuentes a las que ha tenido acceso ECD explican que la opinión que comparten los principales ejecutivos del país es conseguir un Ejecutivo estable cuanto antes y que “no ponga palos en las ruedas de una recuperación incipiente”. Pero sobre todo, el fin es evitar unas nuevas elecciones.
“No podemos tener el país paralizado seis meses. España necesita certidumbre y estabilidad para seguir adelante con las reformas y no frenar la recuperación económica”, defienden desde la cúpula de una compañía destacada del Consejo Empresarial para la Competitividad (CEC).

Estos son los planes B que desde sectores de las grandes empresas tienen elaborados y que sin lugar a dudas ya están moviéndose para obtener lo que desean.
Y por el interés que tiene el conocerlo, lo público en mi blog.

                                16 enero 2016.

 

 

viernes, 15 de enero de 2016

ENRIC SOPENA DEFIENDE UN PACTO PROGRESISTA.


ENRIC  SOPENA  DEFIENDE  UN PACTO  PROGRESISTA.

 

El director de ELPLURAL.COM cree que lo visto en el Congreso “no favorece”  a la imagen “del cambio” que representa la Cámara Baja desde que “vivimos en democracia”.

Enric Sopena, ha considerado que el PSOE y Podemos podrían trabajar para llegar a un acuerdo entre dos fuerzas progresistas que “deberían ir juntas “pero antes ha puntualizado, el partido de Pablo Iglesias debería dejar de hacer “los numeritos a los que acostumbra”.  Sopena ha recordado los pactos conseguidos entre los socialistas y Podemos tras las elecciones municipales y autonómicas  de mayo pasado.

El PSOE no puede pactar con el PP.

En el programa En jake de Euskal Telebista, Sopena ha descartado, a cambio, un pacto entre el PSOE y el PP. “Es imposible”, ha dicho el director de ELPLURAL.COM, que ha explicado que los socialistas no pueden llegar a un acuerdo con una formación política que “ha demostrado que más que un partido es más cosas, que todo el mundo sabe. No se puede estar con un partido así”, ha insistido.

El Congreso representa el cambio.

Sopena ha valorado la elección de Patxi López como presidente del Congreso de los Diputados como “algo bueno para España”. Sobre la sesión constitutiva de la Cámara Baja este miércoles, el director de ELPLURAL.COM ha considerado que hubo cosas “poco adecuadas”, aunque subrayó su “respeto” hacía todos.

“El Congreso de los Diputados viene del cambio, cuando por fin tuvimos un país con democracia, con libertades. Lo que está pasando no favorece a esto”, ha dicho el director de ELPLURAL.COM sobre algunas de las cosas ocurridas en la sesión parlamentaria de ayer, como la aparición de la diputada de Podemos Carolina Bescansa con su bebe ó el grupo musical que acompañó a Compromis.

                                  15 enero 2016.

jueves, 14 de enero de 2016

LAS RABIETAS DE PABLO IGLESIAS.


LAS  RABIETAS  DE  PABLO  IGLESIAS.

 

EL Sr. Pablo Iglesias da la impresión, que sigue en campaña electoral a tenor de las “rabietas” que nos está demostrando, a partir de no haber obtenido en las urnas el 20 D, el contrato de alquiler que le permitiese ocupar el palacio de La Moncloa
Tiene este “emergente líder”, un sentido de la política muy suyo, porque la voluntad de pacto que está demostrando es la de “O me dan la razón ó me enfado”.
Y además sigue faltando al respeto al Congreso de los Diputados, que no es un circo. Faltando también en mi opinión, a Pedro Sánchez y a los socialistas acusándolos de entregarse al PP por un cambio de sillones en la Mesa del Congreso.
Con esas actitudes Pablo Iglesia parece más un  “politiquillo de tres al cuarto” que un líder de un partido serio. Porque además, nos debe considerar tontos  a los españoles, puesto que lo que ha quedado en evidencia es que era él, quien  quiere más grupos parlamentarios  de los que el propio Reglamento actual de la Cámara de Diputados permite.
La verdad, me parece que vamos a asistir en esta legislatura a numeritos de todo tipo a cargo de Pablo Iglesias, sino cambia su comportamiento actual. Vamos a poder comprobar su falta de respeto a los que representan la soberanía nacional, y algún que otro numerito más propio de actuaciones en un Circo, como las que ofrecieron ayer en la Asamblea de Diputados, donde se eligieron los miembros de la Mesa.
Las rabietas de Pablo Iglesias, son curiosas y teatrales. Todo el mundo sabe – menos él – que se debe respetar la pluralidad surgidas de las urnas, y que el entendimiento pasa por negociar y pactar con los diferentes partidos surgidos del 20 D, y no por las “rabietas” por no lograr, lo que no era posible. Hacer de un solo partido en una sola candidatura, cuatro grupos en el parlamento. Eso es el ABC del parlamentarismo.
Ha sido vergonzosa su actuación cuando no ha conseguido lo imposible. Da la impresión, al menos yo estoy convencido de ello hace tiempo, que lo que quiere Pablo Iglesias es que se vuelvan a convocar elecciones, seguramente porque quiere tener en estas, más votos de los que ha tenido el 20 D.
Pero por si no lo sabe, le quiero recordar a ese “politólogo emergente”, que la reforma constitucional que él dice querer, exige pactar con el PP por un doble motivo. Porque es la primera fuerza política en España y además porque cualquier reforma constitucional exige además una mayoría que solo es posible lograrla con un pacto entre todas las fuerzas del arco parlamentario.
Lo que quiere, me recuerda el constitucionalismo español del siglo XIX, donde las Constituciones eran solamente papeles al servicio del partido en el Gobierno. Y como ese modelo ya no sirve para este siglo, un consejo a cambia ó se va a tener que volver a la Universidad a dar clases.
Porque ni usted, ni Podemos siendo el cuarto partido votado, puede imponer una verdad absoluta, la suya, pero sabe porque, pues porque las verdades absolutas NO EXISTEN.
Y quiero aprovechar esta ocasión, para saludar e identificarme con las palabras de Albert Rivera cuando en el debate celebrado ayer con Pablo Iglesias en la COPE ante las provocadoras intervenciones de este le dijese:
“Te veo muy enfadado. Así no se puede empezar una nueva Transición. Si Carrillo y Fraga, ó Felipe González y Adolfo Suarez se hubieran hecho reproches, no estaríamos hoy así.”

                                   14 enero 2016.

miércoles, 13 de enero de 2016

LAS INVESTIDURAS NO GARANTIZAN LA GOBERNABILIDAD.


 

 

Los resultados de las elecciones del pasado 20 de diciembre, han provocado muchos cambios en el escenario parlamentario del país. Uno de ellos es el fraccionamiento de los escaños del Congreso de Diputados en un buen número de partidos con presencia en el mismo. Que están dificultando la investidura del Presidente del Gobierno y en consecuencia la formación del nuevo Gobierno de la nación.

Mientras se barajan los escaños de apoyo de unos y otros para lograr la investidura del Presidente del Gobierno, las matemáticas de los escaños hacen muy complicada la investidura del futuro Presidente del Gobierno.

Las dificultades que se están constatando las va a tener Mariano Rajoy, e incluso fracasado en su intento, también se perfilan para Pedro Sánchez de ser investido Presidente del Gobierno.

Claro que en política, lo que hoy puede parecer imposible y es imposible, puede que suceda, mañana, y  puede suceder y sucede, y no pasa nada con ello. Así es, nos guste ó no.

Pero dadas las circunstancias  en este momento, creo que si bien es importante, muy necesario y obvio, alcanzar la investidura del Presidente del Gobierno, lo es más que el nuevo Gobierno sea capaz de garantizar la estabilidad para llevar a cabo los cambios que se necesitan en el país.

Porque si algo hay seguro para mí, es que con la aritmética parlamentaria surgida del 20 D, no se debe confundir el que la investidura del Presidente sea a su vez la garantía de estabilidad de su Gobierno.  

Veamos, en teoría son cuatro las posibilidades que al día de hoy se abren para investir Presidente y que se forme el Gobierno.

En primer lugar que el partido que ha sido más votado, que en este caso es el PP con 123 escaños trate de formar Gobierno. En ese caso Mariano Rajoy tendría que ser investido Presidente, y para ello necesitaría el apoyo o la abstención del PSOE. Pero no parece que vaya a tener ni una cosa ni la otra, ya que Pedro Sánchez, su Secretario General lo ha venido reiterando: “Ni por acción ni por omisión el PSOE apoyará a Mariano Rajoy ni a ningún otro candidato del PP para formar Gobierno”.

 Así mismo, el PP debería contar con la abstención de Ciudadanos.

Con estos datos hoy, no parece claro que Mariano Rajoy pueda formar Gobierno. Quizá por eso, el PP. trabaja ya en la perspectiva de otras elecciones, aunque no cese hasta el último minuto, de plantear un acuerdo con el PSOE y Ciudadanos. De difícil y dificilísima ejecución.

Y tras ese fracaso, aparece la voluntad de Pedro Sánchez de tratar de alcanzar un pacto de progreso y de izquierdas con otras fuerzas políticas.

A mí me parece, que una hipotética alianza del PSOE, Podemos, IU  y el apoyo ó la abstención  de partidos que participan en el nuevo Gobierno Catalán que quieren la independencia saltándose a  la torera la unidad de España que fija la Constitución. Son factores que no parece que vayan a facilitar el acuerdo, o en todo caso no sería un Gobierno estable capaz de hacer posible el cambio que necesita el país.

Entre esas fuerzas, tendría que estar Podemos, precisamente el gran rival de los socialistas, cuya aspiración máxima es la de sustituir al PSOE para figurar el partido emergente al frente de la izquierda, después de haber fagocitado a IU.

Hasta el día de hoy, Pedro Sánchez está ofreciendo con propuestas serias y de posible consecución con los acuerdos de otras fuerzas, las posibilidades de alcanzar un pacto, entre ellas con Podemos, pero sin aceptar y con razón, los irrealizables propósitos de Pablo Iglesias de realizar un Referéndum en Catalunya y que se acepte la creación de tres grupos parlamentarios en el Congreso de los Diputados con los que Podemos se presentó a las elecciones, además del suyo propio a nivel nacional.

Cuestiones, que yo no veo por las declaraciones que viene manifestando Pablo Iglesias, muy difíciles a que renuncie a ellas, aunque no imposibles. Pero ello requeriría un nuevo cambio, un giro a lo que está hasta ahora exigiendo, y que debería explicar a sus huestes. Porque lo que él desea es que se convenzan de una cosa y de su contraria. Capacidad suficiente tiene probada desde su aparición en la vida política, de decir lo uno y lo contrario, dos.

En todo caso, un Gobierno del PSOE con 90 diputados sería un Gobierno muy débil, amén de tener “los apoyos” con la presencia de Podemos en el Gobierno ó fuera de él. Precisamente la fuerza política empeñada en acabar con el PSOE, para ocupar la referencia de la izquierda en un “nuevo bipartidismo” PP – Podemos.

En mi opinión pues, los éxitos en la investidura del Gobierno con Pedro Sánchez como Presidente por sus propuestas, serían posibles, pero la gobernabilidad con Podemos sería imposible creo yo. La incertidumbre, la inestabilidad y debilidad que comportaría un Gobierno con esa composición, ó apoyos parlamentarios, serian un gran problema que dificultaría, a todas luces, la puesta en marcha de las medidas que se requieren para recuperar España en la senda del crecimiento económico, como medida necesaria para crear empleo, así como para recuperar y fortalecer el Estado de Bienestar.

Y finalmente, que ante las imposibilidades de  Mariano Rajoy y de Pedro Sánchez para ser investidos y puedan formar Gobierno, tengamos que ir a la convocatoria de unas nuevas elecciones.

Hoy, Pedro Sánchez presentará el bloque de compromisos electorales del PSOE en el Congreso de los Diputados, en forma de proposiciones de ley y no de ley.

Son la quincena de propuestas que se consideran prioridades para los socialistas y que se quieren compartir con otros grupos parlamentarios.

Quince propuestas necesarias “PARA LIDERAR EL CAMBIO.”

La derogación de la Reforma Laboral y la elaboración de un Estatuto de los Trabajadores.

El aumento del Salario Mínimo Interprofesional.

La derogación de la LOMCE.

Un pacto contra la violencia de género.

La recuperación del derecho a la Sanidad para todos.

Un ingreso Mínimo Vital.

La supresión del voto rogado.

Fortalecimiento del sistema público de pensiones.

Un cambio en la ley de RTVE para garantizar el pluralismo.

La reforma fiscal.

Un acuerdo sobre Ciencia.

La modificación de la ley de Enjuiciamiento Criminal.

Una ley contra la pobreza energética.

La prohibición de los indultos por delitos de corrupción, y la modificación del Reglamento del Congreso.

Con estas proposiciones, se puede iniciar el cambio que necesitamos en España, pero si Pablo Iglesias se sigue mostrando tan poco conciliador e insultante con el PSOE y sus propuestas. El problema lo va a tener él, porque va a quedar claro ante los españoles, que si no se ha formado un Gobierno para el cambio, que solo es posible con las propuestas del PSOE, es porque así lo ha preferido Pablo Iglesias.

Y ante la posibilidad de que vayamos a unas nuevas elecciones, el PSOE y Pedro Sánchez que han sufrido todos los ataques y críticas por parte de quienes no comparten las posiciones de clase, democráticas, progresistas y de izquierdas, a lo largo de toda una campaña mediática electoral y previo a ella. No deberían enzarzarse en luchas intestinas que no las necesitan ni las merecen ni el PSOE ni el actual Secretario General, y ni mucho menos quienes hemos votado socialista y creemos plenamente en que los cambios en España, solo serán posibles con el PSOE.

Abordar las elecciones a las que parece hoy, que vamos abocados, requiere  realizar un esfuerzo más, con  una activa estrategia para explicar a los españoles las razones por las que la  constitución de un Gobierno progresista de cambio, no ha sido posible.

Y que la soberanía del pueblo decida esta vez con sensibles modificaciones de los resultados de las urnas.

Por eso me atrevo a terminar esta reflexión, dedicada a los militantes socialistas y de forma especial a la Comisión Ejecutiva y a todos sus dirigentes diciendo que: Frente a tirios y troyanos, el PSOE tiene que continuar en la tarea de lograr liderar la unidad de la izquierda en este país con otras fuerzas, seguir defendiendo los intereses de los trabajadores y de los más necesitados, y con esos objetivos tienen que hacer a su vez, como se dice en ese bello poema de Dante, y con el cual Carlos Marx terminaba su prólogo a la primera edición del capital :

“Seguí il tuo corso, e lescia dir le genti”.

“Sigue tu camino y deja decir a la gente”. 

                                  13 enero 2016.