Hoy, y no solo
porque es el 1º de mayo, sino como ayer y como mañana, y a pesar de los efectos
que han producido las movilizaciones de los jubilados, y las reclamaciones de
los mismos, llenando las calles de España, poniendo al descubierto las
carencias del Sistema Público de Pensiones, y la ausencia de medidas del Gobierno
de Mariano Rajoy, debemos de continuarlas y además traducirlas en un rechazo a
votar las candidaturas del PP, cuando llegue la ocasión.
Porque las “propuestas esbozadas” como
consecuencia del acuerdo entre el Gobierno del PP y el PNV, ante las grandiosas
movilizaciones, que se han anunciado si se aprueban los PGE, son absolutamente “Parches” que “ni abordan ni resuelven las reivindicaciones de garantizar el
incremento de las Pensiones según el IPC”, - no solo para este año y el que
bien - ni la “Reforma estructural en
profundidad que requiere nuestro Sistema Público de Pensiones”. Y ese es el
problema que en el fondo, solo se podrá resolver cuando acabemos con el
Gobierno de Mariano Rajoy.
Porque de ningún modo,
los “Planes de Pensiones Privadas”,
son la forma de solucionar los actuales problemas de los pensionistas y los
trabajadores en activo. Esta sugerente propuesta que en su día anunciaron Mariano
Rajoy y su Gobierno, y que persiste aun en sus sesos, solo beneficiaria a la
Banca y a las compañías de Seguros, que tendrían unos ingresos millonarios
mensuales, “Así, por la cara”.
Pero los “parches al Sistema Público” que
anuncian aplicar cuando se aprueben los PGE, solo nos garantiza la continuidad en la “Caída
libre deficitaria” hacia su quiebra total y su desaparición del
Sistema, por la falta de los ingresos
suficientes por cotizaciones, y de otros provenientes de nuevos impuestos que a
la Banca y a las Transacciones que se le deben imponer porque son, tan
necesarios como posibles, si hubiera la voluntad política - de la que carecen –
tanto el PP como Ciudadanos.
Además, lo que se
necesita, es una amplia reforma fiscal que grave los capitales para hacer
sostenible las pensiones con su revalorización según el IPC, y la viabilidad
del conjunto de Servicios públicos, que cada día se están deteriorando más y
más.
Por eso, el rechazo
del Presidente del Gobierno, a subir las Pensiones según el IPC, solo ha sido parcialmente
modificado gracias a las MOVILIZACIONES de los jubilados, y solo por eso. Pero
sigue siendo, una operación de “cosmética
política” que solo pretenden acallar las voces….y los votos en contra del
PP en las urnas, de los millones de jubilados.
Sería un craso
error, como lo son, los de aquellos que piensen que Mariano Rajoy va a tener
una reacción favorable a las reivindicaciones de los jubilados y de los futuros
pensionistas.
Lo único que hoy
tenemos, es que si bien el PP está preocupado por lo que le pueda pasar, como
consecuencia de las manifestaciones y las reacciones de los pensionistas el día
que hayan elecciones, ha tenido que cambiar el incremento que había dado a
nuestras pensiones, y anunciar que se aplicara el IPC los años 2018 y 2019.
Con esas
modificaciones, lo que pretenden es aparentar, que responden a nuestras movilizaciones, y por eso
no van a tomar ninguna medida inmediata para dar plena satisfacción a las
legítimas reivindicaciones de más de 9 millones de pensionistas, y de los
futuros, que vemos con gran preocupación la situación de quiebra del Sistema
Público de Pensiones que han provocado el Gobierno de Mariano Rajoy.
El Gobierno, lo que
ha hecho, es un juego de “Trileros de
Feria”. Porque de hecho, no ha respondido a nuestras reivindicaciones, que no
son solo la revalorización de las pensiones según el IPC, sino las reformas
estructurales que garanticen la continuidad del Sistema. Y de hecho, ha propuesto
“Parches y más parches”, pero que no
garantiza salir del déficit actual, que es el que mantiene la crisis de la Seguridad Social, y de su mantenimiento.
Porque rebajar el
IRPF a los pensionistas mayores de 80 años, significa “NO HACER PRACTRICAMENTE
NADA”. Muchos pensionistas, no llegan a tributar, y gente de 80 años no hay
tanta. Esa es una medida, que no aporta soluciones a los problemas: “Incrementar según el IPC, y la sostenibilidad financiera del Sistema
Público de Pensiones”.
La receta para
mejorar las pensiones, pasa únicamente por crear más empleo y bien retribuido,
y eso requiere la derogación de la ley de la Reforma Laboral, porque mientras
que eso no sea una realidad en nuestro país, la solución más obvia es que el
dinero que falte al Sistema para hacer frente al abono de las pensiones, sea
proveniente de impuestos ó deuda, como otros muchos gastos del Estado, que se
resuelven de esta manera.
Pero la solucion
del problema de las Pensiones y del
propio Sistema Público, hace necesario que no sean solo los trabajadores en
activo con sus cotizaciones, quienes financien las pensiones.
Porque así, si no
hay nadie más que participe en su financiación, el fin del Sistema Público,
tiene ya fecha de caducidad – como los medicinas -. Por eso, no se puede perpetuar
esta situación, como si de una condena se tratase al Sistema al día de hoy, por
injusto y creador de problemas.
El Sistema, ni es
injusto no crea problemas. El Sistema de reparto, es y debe de continuar siendo
la base de un Sistema de Pensiones Público. Y mientras que por razones ajenas a
los pensionistas y los trabajadores en activo – por las crisis económicas y las políticas conservadoras y
reaccionarias del Gobierno de Mariano Rajoy –, no hay suficientes ingresos
para pagar las pensiones, estas se deben de pagar mediante impuestos.
Una sociedad, como
la nuestra, tiene que responder a su población pasiva, como sociedad en su
conjunto, no únicamente con las cotizaciones de los trabajadores en activo.
Porque el sistema de reparto, “Ya no
puede mantenerse, por el deterioro de los salarios, y de la tasa de actividad
de los trabajadores”.
En mi opinión, hace
falta ¡YA! un impuesto para pagar las pensiones. Un impuesto a la Banca, como había
propuesto ya, el PSOE. Pero además urge una autentica reforma integral fiscal.
No es admisible,
que el 75% de los impuestos en este país,
se recauden por IRPF e IVA, es decir, que lo pagamos los consumidores y
los trabajadores, mientras que no llega al 25% los que proviene del impuesto al
capital.
Por eso hay que hacer
una profunda reforma fiscal, pero de inmediato urgen las medidas y las
actuaciones que impidan la evasión fiscal que anualmente está entre 60,000 y
90,000 millones de euros, lo que permitiría amortizar el actual déficit del
Sistema. Una medida que además de justa, podrían sostener las pensiones y el
conjunto de servicios de nuestro Estado de Bienestar, que cada día por las
políticas conservadoras y reaccionarias del Gobierno de Mariano Rajoy se están
deteriorando.
Pero estas justas,
legítimas y necesarias reformas no serán
posibles – en mi opinión – con Mariano Rajoy de Presidente del Gobierno. Hace
falta, que sigan nuestras movilizaciones, las de los pensionistas, las de mujeres
contra su discriminación, los trabajadores en activo y los jóvenes por su
derechos a trabajos y salarios dignos, hasta lograr unas nuevas elecciones, y
en ellas situemos por los resultados en las urnas a Pedro Sánchez, Presidente
de un gobierno socialista.
Ese es el reto, y
por cuya consecución nos debemos dedicar la inmensa mayoria de los españoles.
Porque solo desde el modelo de la nueva Socialdemocracia que representa el PSOE
y su líder, será posible llevar a cabo las transformaciones necesarias en
nuestro país. Empezando por el cambio del Gobierno y de las políticas que ha
venido aplicando el conservadurismo de la derecha, del PP y que Ciudadanos pretende
continuar.
1 mayo 2018
César Llorca Tello.
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