martes, 28 de abril de 2015

TODO LO QUE SUBE, PUEDE BAJAR Y BAJA.


Aunque las encuestas que se están realizando ante las elecciones Municipales y Autonómicas, que se celebraran el próximo mes, hayan estado “muy cocinados” sus resultados, llegaron a situar Podemos como la 1ª fuerza política. Al paso de unos meses, y sobre todo después del fiasco alcanzado por esta organización en las elecciones de Andalucía, las encuestas que se vienen publicando en las últimas semanas, muestran un claro descenso de los apoyos a Podemos.
Según los datos de  Metroscopia  que situaron al máximo a principios de año a Podemos con un 28,2%, ahora si nos fijamos en los datos brutos de estos sondeos, en lo que responde la ciudadanía de forma espontánea, la caída en la intención directa del voto es algo  menor, pasando del 22,2% en noviembre del 2914, al 12,8% que obtuvo la semana pasada en una encuesta interna de Metroscopia.
Este descenso, ya no sitúa a Podemos como primera fuerza política y además a mi me viene a confirmarme en el convencimiento de que los sondeos no reflejan ni van a reflejar en esta situación, los resultados que arrojen el recuento de las urnas. Y ello por un cúmulo de circunstancias que conviene tener en cuenta para la oportuna reflexión antes de emitir nuestro voto.
Porque estos descensos, aun contemplando el que no sean los resultados de las urnas, se deben a circunstancias que sería de muy torpes el querer ignorarlas.
En primer lugar, la Troika Podemista, nació con el rechazo a lo que llamaron “la vieja política”. La Transición del 78 y la democracia restaurada, a las que llamaron de “Traición al pueblo español”. Aprovechando la insatisfacción de la población por la acumulación de problemas, desempleo, perdida de protección social, bajos salarios, desahucios y otros, jugaron con un lenguaje estudiado a rechazar por malo a “Todos los demás”, especialmente a los partidos PP y PSOE y a “La Casta” y a la Corrupción como si esta la practicáramos todos los españoles, en definitiva a la democracia.
Con ese lenguaje nació Podemos y sin ninguna propuesta viable para resolver los problemas que tenemos los españoles. Acusando y confundiendo. Pero al paso de unos meses se ha comprobado cómo algunos de los defectos que señalaban como propio de los partidos tradicionales como el PP y PSOE, han hecho su aparición en la corta vida de Podemos.
Episodios como el caso de Monedero, ó las luchas internas por el control de la organización, nos han venido a recordar problemas que están en el origen de la desafección ciudadana hacia los partidos PP y PSOE. Queriendo “barrer la vieja política” e imponer una “Nueva política”, en poco tiempo nos han demostrado que lo que predicaban en su nacimiento, que iban a acabar con lo viejo y caduco del sistema democrático que trajo la Transición del  78, su corta vida nos ha mostrado la hipocresía que han venido practicando en su organización.
Con ese lenguaje, y radicales pero idílicas formulas para resolver los problemas y una campaña mediática, prensa y emisoras de televisión impulsaron a Pablo Iglesias que parecía más un profesional de la emisora de televisión que el de un entrevistado. Asi con ese conjunto de factores, lenguaje y propuestas extremas pero irrealizables les aupó en los sondeos  hasta elevarlos como primera fuerza del país. Pero como todo lo que sube puede bajar, ha bajado y lo sigue haciendo.
Pero su bajada no se debe fundamentalmente a lo señalado anteriormente, otro aspecto también está influyendo en ese “deshincharse” de Podemos, es que mientras la intención del voto a esa organización son solo intenciones derivados de los estados de ánimo, que no de aceptación de un programa electoral –que entre otras cosas aun no lo han dado a conocer- pero con signos de una excesiva radicalización en algunos aspectos que los hacen inservibles, como son los problemas de la deuda que nos llevaría a situaciones similares a las que hoy vive Grecia, ó la reducción de la semana laboral a 35H. sin pérdida del salario. Un medida que se puso en práctica en Francia y que ha sido un notorio fracaso, que no serviría ni para crear empleo, ni para mejorar nuestra productividad.
Y si el estado de ánimo de los españoles, en la medida de que hoy no existen liderazgos sólidos que sean capaces de diagnosticar lo que nos está pasando y que retos debemos afrontar como sociedad, vienen a contribuir a que los mismos en general se encuentran totalmente desorientados. Pero de esa confusión, que afortunadamente la población está tomando conciencia y ya se está liberando de ella, era de donde surgían las intenciones de voto a Podemos, ahora al igual que subieron en el podio de los sondeos, en un extraño ascenso, que parecía “el asalto a los cielos”, hoy ya se empieza a constatar de que aquello que subió ya empieza a bajar con la misma rapidez con la que inicio la subida.
Otro aspecto que explica quizá la tendencia al descenso de las opciones de voto a Podemos, ha sido la configuración de un proceso de construcción y reclutamiento de cuadros, en la que la gran mayoría de asambleas de un nivel u otro, los militantes más activos han sido principalmente antiguos miembros de IU, de Izquierda Anticapitalista, Trotskistas, etc. De hecho los principales dirigentes de la Troika Podemista, Iglesias, Errejón y Monedero provienen de esas formaciones políticas.
Y aunque cada uno haya militado donde les pareciese, - era su derecho -, no es extraño que muchos de los inscritos o simpatizantes con esta formación se hayan preguntado si han renunciado a sus ideologías iníciales, simplemente por cambiar de nombre a Podemos, o siguen y van a defender los postulados más propios de la extrema izquierda de donde provienen.
Porque los españoles se han situado siempre mayoritariamente, nos guste o no, en el centro izquierda, muy lejos de los extremos de un signo u otro.
Quizá los resultados de las elecciones en Andalucía han evidenciado esa tendencia con claridad meridiana con el voto al centro izquierda que representaba Susana Díaz y el PSOE, algo que desde la restauración de la Democracia en el 78 en nuestro país se ha puesto de manifiesto en las sucesivas elecciones políticas que se han llevado a cabo en nuestro país en 37 años desde que los españoles empezamos a votar.
Quizá fruto de esa moderación política en nuestro país, los ciudadanos han demostrado a lo largo de los años, que no desean una ruptura total con el pasado, sino que esperan que nuestros problemas como país, sean solucionados mediante reformas profundas, pero sin enviar al baúl de los trastos viejos, la mejor etapa de nuestra historia.
Es curioso que hoy, desde espacios políticos como Podemos y otros de menor importancia, se sitúan más en las críticas a las conquistas democráticas a raíz de la Transición del 78, que a las críticas al régimen franquista que oprimió a todo nuestro pueblo durante una Dictadura de 40 años y cuyas herencias hoy aun son bien patentes. Ahora se culpa a quienes trajeron la Libertad y la Democracia, y que eso lo hagan quienes ni tienen ideología ni organización, porque Podemos contiene rasgos ultraizquierdistas que hoy se agrupan con las aspiraciones de ser el nuevo bastión político en este país, tiene bemoles.
Sí, hay cosas muy curiosas, que habría que desenmascarar negando nuestro voto a Podemos. Ya que a principios del 2014 se hizo público el lanzamiento de un nuevo partido: Podemos, que aunque al principio decían que no eran un partido, paulatinamente se han ido estructurando hacia un partido “atrapalotodo”, especialmente después de las elecciones Europeas y los resultados obtenidos
Lo que ha resultado relevante, es que durante más de un año, nos hemos tragado verdaderos monográficos sobre Podemos, en un amplio sector de medios de comunicación, llegando a un exceso como ha sido el caso de La Sexta TV, que nos han metido Podemos por las orejas hasta el aburrimiento
Si pudiera calcularse, lo que costaría toda la publicidad mediática que ha recibido Podemos, nos saldría una cifra astronómica que difícilmente ningún partido podría pagar. Podemos básicamente, ha sido un producto de marketing, una mercancía política promocionado en los medios.
¿De qué se queja ahora Podemos? sencillamente, porque ha dejado de ser el tonto útil de los medios, del capital, los cuales completando una perfecta estrategia política, ha decidido lanzar una herramienta política que les resulta más funcional: Ciudadanos.
Pero ahora resulta cínico e hipócrita que Podemos salga con el cuento de que ellos nunca han contado con respaldo mediático. Es tomarnos por idiotas a todos los que durante más de un año, hemos venido soportando el bombardeo promocional de Podemos en esos medios, que ahora vienen a criticar.
Sin organización democrática, sin ideología definida, sin programa con posibilidades de realizarse, lo único que nos ha demostrado Podemos al no presentarse a las Elecciones Municipales con su nombre, es que les importa un pepino los problema de los vecinos en los 8000 municipios del país. Quizá porque no tienen ni organización ni programa creíble en cada municipio. Para ello, la estrategia eje de la inspiración de Podemos, viene a ocultar e ignorar, deliberadamente, la confrontación de intereses y la división de clases en la sociedad, entre la derecha y la izquierda
Estos planteamientos constituyen hoy, no solo un grave error político, sino que son el mejor regalo que Podemos está ofreciendo a la derecha carpetovetónica y rancia de nuestro país, que representa el PP., cuya gestión de la crisis es más merecedora de respuestas contundentes y eficaces del conjunto de la sociedad, que las manifestaciones mediáticas de Pablo Iglesias y sus muchachos, en su empeño de presentar una sociedad dividida entre “la gente” por un lado y “la casta” por el otro.
Pero la sociedad, pese a lo que diga Podemos, sigue configurada en clases, por lo tanto la continuación de esa estrategia de Podemos, es el único camino para seguir engañando a sus presumibles inscritos y futuros votantes, sin haber hecho más meritos que “las campañas tertulianas” y el empleo de un lenguaje prepotente que está sirviendo un buen servicio al Gobierno del Sr. Rajoy, facilitando al PP unas ventajas como consecuencia del fraccionamiento de la izquierda.
Por todo ello, hoy Podemos está descendiendo sus opciones de voto en los sondeos. Lo que viene a confirmar que todo lo que sube, puede bajar. Y vaya si baja.

                                                       César Llorca Tello.

                                                         28 abril 2015.

 

 

 

  

 

2 comentarios:

  1. Tengo que rendirme esta muy bien y me ha gustado mucho que resaltes, que estos elementos critiquen mas la transición que a la dictadura.

    Manchelerria esta con Cesar

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  2. Muchas gracias por leerme desde Manchelerria. ESPERO QUE SIGAS LEYENDOME

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