LOS ANALISIS
DE UN ECONOMISTA.
Por el interés y el
rigor del análisis del economista José Carlos Diez, tras el 26 –J, que comparto
en su totalidad, hoy quiero transmitir en mi blog esas valoraciones por el
interés que puedan despertar en aquellos que estamos preocupados por la
situación creada en las segundas elecciones.
Yo ya lo anticipe
en alguno de mis anteriores artículos, y este economista también lo hizo.
Porque la aritmética surgida del 20-D llevaba al conjunto vacio y el escenario
más probable era repetir las elecciones
Hoy las aritméticas
es más clara, y tener que volver a tener que convocar unas terceras elecciones,
aunque improbable y no deseable, no son imposibles
A los 10,5 millones
de españoles que se han abstenido, 700,000 más que en diciembre. La señal es
bastante contundente: No les ha gustado el teatro en el que se convirtió el
Congreso de los Diputados desde diciembre.
Y como España tiene
serios problemas y nuestros parlamentarios se olvidaron de ellos. La abstención,
en la democracia es una clara manifestación que nuestros políticos deben de
interpretar bien el mensaje
Ha habido otro
mensaje del 26.-J, y es que los españoles no quieren que gobierne la izquierda,
ó al menos esta izquierda.
El mayor descalabro
de votos lo ha sufrido Podemos que, tras su unión con IU, ha perdido 1,2
millones de votos. Esos son los mismos votos que perdió Tsipras en Grecia el
año pasado tras un referéndum
innecesario, dado que los griegos dijeron NO a la austeridad, y Syriza
aplicó una semana después un ajuste fiscal, brutal traicionando el voto de la
mayoría de los griegos en el referéndum.
El principal
problema de los españoles en el CIS, es el paro y el rechazo al PSOE y a
Podemos, que no suman una mayoría para gobernar, es porque los españoles no
confían en ellos mayoritariamente para reducir el desempleo.
La fragmentación de
la izquierda, ha permitido que Rajoy siga en la Moncloa, a pesar de la
corrupción sistémica en el PP, igual que el ataque de Anguita al PSOE en 1996
permitió que Aznar llegara a la Moncloa.
El PSOE ha sacado
un resultado desastroso. Desde los 11 millones de votos de 2008, ha perdido 6
millones y ha seguido perdiendo votos en estas elecciones. Tiene 85 escaños y
está a 52 escaños del PP, la mayor distancia desde 1975. Aún así, el PSOE es
mucho PSOE. Tiene 5 millones de votos, un ejército de militantes fidelizado
ideológicamente, que se ha dejado la piel en esta campaña luchando contra la
adversidad de las encuestas y el temor a dejar de ser el referente de la izquierda
española.
El PSOE tiene
varios presidentes autonómicos y alcaldes en grandes ciudades que serán la base
para recuperar el poder. Necesita tener un Congreso ordinario y curar heridas.
Necesita cambiar su
relato, que es claramente perdedor. Debe explicar a los españoles que el mundo
ha cambiado, que ha caído el Muro de Berlín y que el proyecto de Podemos, de
Anguita y Cañamero es perdedor en la Globalización. Y que ese nuevo mundo
necesita más política, más gobierno y socialdemocracia para corregir la desigualdad.
La alternativa es
el laissez faire de la derecha ó el comunismo revestido de populismo.
El PSOE debe mirar
al mundo como lo han hecho en sus 137 años de historia tanto su fundador Pablo
Iglesias, como sus grandes líderes hasta Felipe y Zapatero.
Los dos referentes
para la izquierda mundial más interesantes están en EE.UU. Y Reino Unido. Entre Clinton y Sanders, el
PSOE debe optar por Clinton. Y entre Kalm y Corbin, debe mirar a Kalm. Clinton
será la primera presidencia de EE.UU. y Kalm es alcalde de Londres.
El modelo Corbin y
Sanders es perdedor, y como Podemos, solo sirve para que gobierne la derecha.
El PSOE debe luchar
contra sus complejos, que han permitido que Podemos, nazca, fragmente el voto
de la izquierda y el PP suba en votos
En 2004, Zapatero
se encontró una burbuja inmobiliaria. Sin política monetaria, sin control pleno
de la regulación bancaria, es imposible pinchar una burbuja. Si encuentras a
alguien con su plan y medidas concretas para pinchar esa burbuja, te ruego me
lo presentes.
Zapatero hizo una
política fiscal prudente, teniendo el primer superávit fiscal de la democracia
y bajó la Deuda Pública neta al 22% del PIB. Duplicó el gasto en educación y en
becas, y triplicó el gasto en I+D+i para avanzar en la economía del
conocimiento y contrarrestar el efecto de la burbuja. Muchas empresas, hoy
tienen éxito en la exportación, crean empleo, pagan buenos salarios y pagan
impuestos, gracias a aquellas políticas.
La burbuja pinchó
en medio de la peor crisis financiera mundial, y luego con la crisis griega,
que provocó una grave crisis institucional y económica en toda Europa. En mayo
2010, la opción era que Grecia saliera del euro ó rescatarla. Para rescatarla,
se pusieron condiciones y Zapatero optó por aplicar los recortes antes de
provocar el Lehman 2,0.
Es lo mismo que
hizo Felipe en la crisis financiera del verano de 1992. Es lo que no supieron hacer, ni Rajoy en 2012, ni
Tsipras en 2015, que acabaron rescatados.
El otro debate
absurdo que ha fomentado Podemos y que ha acompañado al PSOE, es que se pagaban
las deudas antes que rescatar a las personas. Impagar la deuda, supone
abandonar el euro como descubrieron Tsipras y Varoufakis el pasado año y
destruiría al menos otro millón de empleos. Por eso, Carmena pagó 900 millones
de euros de deuda el pasado año, a pesar de que en Madrid siguieran habiendo
pobres ó que en su programa amenazasen con impagar.
Pero tener elevada
la deuda, no significa que no se pueda luchar contra la pobreza y la
desigualdad. La condición necesaria es crear empleo y por eso el PSOE debe
recuperar la confianza de los españoles para reducir la tasa de paro. Y lo debe
hacer con un buen relato del siglo XXI, con coherencia, con convicción y
demostrando capacidad de gestión en las numerosas comunidades y ayuntamientos
donde gobierna.
Pero desde 2014,
hemos comprobado que crear empleo no es suficiente, los jóvenes sufren la
precariedad e infra-salarios. Desde la reforma laboral de 2012, se han perdido
20,000 millones en salarios, y son los jóvenes los que sufren principalmente el
problema
Muchos han votado a
Podemos, creyendo sus falsas promesas y no identificar al PSOE como su
referente. Hay que corregir el problema en pre-redistribución, hay que cambiar
el sistema de negociación colectiva que impulsó Rajoy en 2012 y hay que subir
el salario mínimo el 2%, objetivo de estabilidad de precios del BCE.
El PSOE debe
recuperar las universidades, el voto progresista intelectual y conectar de
nuevo con los jóvenes, como hizo Felipe en 1982 y Zapatero en 2004.
Hay que priorizar
la lucha contra la pobreza severa que afecta al 2,5% de los hogares. Por
ejemplo, en Madrid el PP y Ciudadanos perdonan al 0,2% de madrileños más ricos
600 millones, mientras hay miles de familias con niños que no comen las
proteínas suficientes, que no llevan calzado adecuado al colegio y que no
tienen un lugar adecuado para estudiar.
Si Cifuentes le
deja a este economista observador el BOE de Madrid 24 horas le monto el plan.
Se elimina la
exención del impuesto, se elabora un censo de familias, se prioriza guarderías
escolares para familias con mujeres divorciadas ó solteras con hijos a cargo.
Se garantiza que coman tres veces al día y se lleven la cena en una caja como
hace Susana Díaz en Andalucía (cuesta
tres euros). Y se usan las lanzaderas de empleo de Peridis para que esas
mujeres encuentren un empleo cuanto antes.
El PSOE necesita
tiempo para cicatrizar todas esas heridas y recuperar los votos perdidos. Pero
Rajoy, quiere empezar a hablar con el PSOE y recuperar los canales de comunicación
totalmente rotos, para abordar cambios en la Constitución, debe pedir perdón.
Que explique a los
pensionistas que se encontró las cuentas de la Seguridad Social sin déficit y
66,000 millones en la hucha tras la
gestión de Zapatero. También el porqué ha dejado un agujero de 15,000 millones
en 2015 y se ha pulido la hucha. Que explique a los jóvenes que su reforma
laboral es la causa de su precariedad y que la cambie. Que explique que la
burbuja se formó desde 1998 hasta 2004 con gobiernos de Aznar, y aumente el
presupuesto en educación y en I+D+i para recuperar los niveles que dejó
Zapatero. Que explique que cuando llegó a la Moncloa en 2011, Zapatero le dejó
30,000 millones en la cuenta del Banco de España y que la crisis de Bankia se
pudo evitar.
El PP tiene 137
escaños y la obligación de formar gobierno. Pero necesita 39 escaños más, y la
falta de empatía de Rajoy es el principal escollo para formar gobierno, y el
mayor riesgo para unas terceras elecciones.
Hasta mayo, el
déficit de la administración central y de la Seguridad Social ha aumentado con
respecto a 2015, y el de CC.AA. se ha reducido mínimamente. La recaudación de
impuestos cae un 3% y Rajoy dijo en el presupuesto que aumentaría un 4%
En octubre hay que
recortar 8000 millones en el presupuesto de 2017, y Rajoy ha vuelto a mentir a
sus votantes como en 2011 diciendo que bajaría los impuestos.
España necesita un
Kennedy que haga lo que necesita el país, pero ha ganado las elecciones un
Frank Underwood de House of Cards, cuyo único objetivo es sobrevivir políticamente.
Mariano, se fuerte,
resiste y pide perdón al PSOE por todas las mentiras que has vertido sobre ellos
desde 2004.
Personalmente le deseo
que la fuerza le acompañe para solucionar los graves problemas que tiene nuestra
querida España. La va a necesitar.
1 julio
2016.
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