miércoles, 18 de marzo de 2015

LA REGENERACION POLITICA EN LOS PARTIDOS.



En plena campaña electoral, como la que estamos viviendo este año 2015 tan abrumadoramente repleto de elecciones a todos los niveles, no vienen a faltar algunos aspectos que se han transformando en exigencias ya, que ya venían marcando como causa de la desafección a la política y a los partidos de la ciudadanía, por una excesiva interiorización de la vida interna de los partidos, por la falta de un funcionamiento más abierto, más vinculado con la sociedad, en definitiva más participativo y democrático de los partidos políticos.

Hoy, además del empeoramiento de la situación económica y laboral, para la inmensa mayoría de la sociedad que constituimos los millones de parados y jubilados, así como los que con un contrato precario – ahora sí, ahora no – y con un salario tercermundista, y en general para el conjunto de la sociedad, que reclamamos soluciones justas y rápidas ante esta problemática. También, se echa en falta un funcionamiento más democrático de los partidos, en todos sus ordenes, desde el hoy considerado régimen interno para elegir a los órganos de dirección a todos los niveles,  se ha venido a transformar en una exigencia más de la sociedad porque hoy los ciudadanos ya somos  conscientes de que un mayor funcionamiento democrático de los partidos políticos es de vital interés para ellos mismos, porque tiene relación directa con la solución de nuestros problemas y está íntimamente vinculado al desarrollo de la democracia en nuestro país. Porque no habrá una excelente Democracia en España si no hay un excelente funcionamiento democrático de los partidos políticos.

La regeneración política, la democratización de los partidos políticos está hoy como una asignatura a examen, de todos los partidos políticos, es de una importancia singular, para los ciudadanos, lo es también para la Democracia y para que esta alcance unas dimensiones en nuestro país, de gran calado y que los españoles podamos sentirnos en un país plenamente democrático.

Y es que cuando desde el conjunto de la sociedad, se observa el funcionamiento interno de los partidos políticos, cuya democracia interna en algunos casos se asemeja a la de las logias masónicas de antaño, a los ciudadanos nos molesta que a aquellos partidos en quienes depositamos nuestra confianza, otorgándoles nuestro voto, tengan un funcionamiento interno basado en una raquítica visión de la democracia.

A mí me parece, que un partido conservador y de derechas, derechas, como es el PP., se dirija como se dirige. Es decir que el Santo Sanctórum sea quien decida quién va a encabezar las listas a las elecciones Autonómicas, a las Generales y las de los Ayuntamientos de las capitales de provincia, me parece muy bien, que la derecha actúe como lo es, con espíritu dictatorial. Es lo suyo. Sin embargo un funcionamiento más democrático tampoco le vendría mal a quienes están poseídos de un autoritarismo que a veces parece heredado de tiempos vergonzantes de la historia de nuestro pueblo, y no les vendría mal practicar eso de la democracia en su partido. Pero allá ellos. 

Sin embargo, los partidos políticos de izquierdas, y de entre ellos el PSOE a mi entender, deberían  proceder de forma radicalmente distinta hacia la transformación que necesitan sus partidos para materializar y hacer posible la participación en sus políticas generales, así como en la elaboración de las candidaturas a las instituciones Locales, C. Autónomas y Generales, de una inmensa mayoría de simpatizantes, que junto a los militantes – que hoy salvo en el caso de la Comunidad Valenciana que lo ha llevado a efecto actuando de pionero en esta necesidad – el PSOE lleve a efecto unas “Elecciones Primarias Abiertas” en toda la geografía, para que más allá de los militantes, miles y miles de simpatizantes puedan participar en dichas “Primarias Abiertas”.

Esa asignatura por aprobar las formaciones de izquierda, debería como en el caso del PSOE que este, procediese en el próximo Congreso a la modificación estatuaria pertinente que regulase las citadas “Primarias Abiertas”. En ellas habría que aceptar que el órgano a elegir en cada “Primarias Abiertas” no se constituyese solamente con aquellos miembros de la candidatura que hubiese obtenido la mayoría de votos, como actualmente se realiza. Aparece como una hipocresía ó una contradicción, querer organizar unas “primarias internas” como fórmula de participación democrática y cuando se cuentan los resultados de las votaciones, el grupo perdedor, queda la margen - aun por un voto – del equipo que va a dirigir la agrupación o representar al Partido en los comicios políticos que sean.

Esa forma, es una práctica nefasta ya que deja al margen a una parte – la que sea minoritaria – al margen del equipo mayoritario llamado a dirigir, y que en general se considera no responsable de lo que venga después. Lo adecuado y necesario para no generar esas situaciones de fracturas innecesarias e incomprensibles el hacerlo, pues no favorecen la acción política de las agrupaciones, es que se regule que el equipo que surja de esas Primarias se constituya con los miembros de cada candidatura proporcionalmente a los votos obtenidos por cada una de ellas. Y mientras el tiempo que medie hasta la regulación estatutaria, que fuese el Comité Federal quien optase por aceptar dichas formas para evitar la continuidad de esas fracturas lamentables en el seno de la misma organización. De modo que el actual procedimiento  empleado sea reemplazado por las formas de mayor participación en base a la proporcionalidad de cada candidatura en el órgano de dirección que se elija, ó de lista para representar al Partido en unos comicios electorales.   

El funcionamiento de elección interna en el PSOE debería adoptar las medidas “Abiertas” que aquí se proponen, porque son medidas de mayor participación tanto a la hora de votar, lo que nos acercaría a los vecinos y simpatizantes, como a la hora de dirigir o representar al PSOE en los comicios a las Instituciones Públicas que aspiremos a gobernar, con el buen equipo que sepa recoger toda la valía y entrega militante que siempre se contemplan en ambas de las candidaturas en liza en las “Primarias”.

Estoy convencido que estas propuestas favorecerán a aquellos partidos que las lleven a cabo, por su acercamiento con la ciudadanía, así como con una mayor participación de las sensibilidades que hayan participado en las “Primarias abiertas”. El PSOE en la dinámica emprendida con Pedro Sánchez debería ir incorporando este funcionamiento que es indudablemente una mayor democratización del funcionamiento del partido y sin ninguna duda, una mayor democracia de la que hoy se practica.

                                       César Llorca Tello

                                        17 marzo 2015

 

 

 

 

 

5 comentarios:

  1. Cuanto me acuerdo del PCE cuando leo cosas sobre la democracia interna de los partidos y organizaciones sindicales

    Rafa el de porzuna

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    1. Me alegra enormemente que sigas mi blog y que me des tu opinión de algunos artículos, siempre coincidiendo en lo fundamental.

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  2. La democracia se convierte en otra cosa cuando llegan los avispados oportunistas a gobernar los partidos y repartir cargos y prebendas entre familias, amigos y dóciles allegados. No hay más remedio que eliminar elementos antidemocráticos y regenerar la vida política en los partidos. ¡¡ Ya mismo !!.

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  3. Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.

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    1. Si pero solamente con la Democracia se puede transformar lo no democrático. No queriendo " Barrer a todos" como algunos pretenden sin proponer nada viable .

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